La organización agraria Apag advirtió ayer de que la superación de las cuotas de producción de tomate asignadas por la Unión Europea a España conllevará penalizaciones que pueden poner en peligro un sector que genera más de 138 millones de euros en la región, y ha exigido la reforma urgente de la Organización Común de Mercado (OCM) en Europa.

El presidente de Apag Extremadura, Bibiano Serrano, adelantó en rueda de prensa las cifras de la cosecha de tomate de este año, que se estima en 1.900.000 toneladas y de la que se ha recolectado el 40% de la superficie y entre el 50 y el 55% de la producción, según recoge Efe.

Serrano dijo que será un 20% superior a la esperada a pesar de la reducción en la contratación del 4,42%, con lo que "se batirán los máximos regionales y nacionales de los últimos años".

El representante de la organización agraria definió la cosecha como "excelente" tanto en calidad como en cantidad, pero explicó que, según la actual OCM de Frutas y Hortalizas para el tomate vigente desde el 2002, España es el segundo país productor de tomate transformado de la UE por detrás de Italia, con una asignación de 1.238.606 toneladas, cifra que ha sido superada todos los años.