El presidente del Gobierno, José María Aznar, defendió ayer la necesidad de proceder a una reforma de la regulación de la distribución comercial. Es "incompatible" con la competitividad que existan más de 700 normas sobre esta materia, argumentó. Así confirmó las insinuaciones del vicepresidente Rodrigo Rato, en el sentido de que es necesario liberalizar los horarios comerciales. Estas afirmaciones provocaron críticas de los sindicatos. Aznar también reiteró la necesidad de un pacto de Estado sobre el suelo.

El dirigente popular hizo estas consideraciones en Sitges (Barcelona) en la reunión anual del Círculo de Economía, que es el foro económico más importante de Cataluña. En el plano macroeconómico, el jefe del Ejecutivo auguró que España cerrará este año con un crecimiento del PIB superior al 2% y destacó que las expectativas para el 2003 son de "mejoría".

SOLVENCIA ECONOMICA

También subrayó la credibilidad y solvencia de la economía española, reflejadas en la equiparación de la deuda española con el bono a 10 años alemán y francés y el alto crecimiento del empleo.

Aznar recordó que si España se ha convertido en un punto de referencia se debe a que es "una institución sólida, que no hace aventuras", en alusión a los nacionalismos.