Parecía difícil que la bolsa española acabara la semana en positivo, pero finalmente lo consiguió. El fuerte repunte de los bancos y la tendencia alcista en la apertura de Wall Street permitió al índice Ibex 35 cerrar la sesión con un ascenso del 1,48% y terminar la semana con un avance del 0,99%.

El entorno general de los mercados bursátiles a la baja hizo que la mejora española fuera todavía más meritoria. El índice selectivo alemán DAX retrocedió el 0,66%, mientras que el FTSE 100 de Londres se dejó el 0,2%, y el CAC francés, el 0,05%.

A pesar de la persistencia de la preocupación sobre la falta de coordinación en Europa para evitar la profundización de la crisis, el euro recuperó posiciones frente a la moneda de EEUU y se cambiaba a 1,256 dólares. La aprobación en el Parlamento alemán de su contribución al plan de defensa del euro, aunque por un estrecho margen, tuvo un efecto positivo en los mercados.

El Ibex osciló entre los 9.000 puntos (registrando así un descenso del 2,85%) y los 9.440 unidades (que suponían un avance del 1,87%). Los dos pesos pesados financieros, el BBVA y el Santander, subieron el 3,13% y el 2,08%, aunque fue Bankinter el que lideró las mayores subidas con un repunte del 4,14%, seguido del Popular, con el 3,83%. Tan solo seis valores terminaron con números rojos, liderados por Red Eléctrica, que se dejó el 1,25%, seguida por Enagás, con un retroceso del 0,91%.

Telefónica se coronó líder de las ganancias semanales del Ibex, con un avance del 4,74%, después de que su filial en Alemania, el operador O2, adquiriera diversas frecuencias tras una inversión de 1.380 millones de euros. A continuación se situaron el Santander (3,43%), Repsol (2,76%), Bankinter (2,64%), Gas Natural (1,5%), Sabadell (1,28%) y Sacyr (0,27%).

En el mercado continuo se negociaron más de 4.400 millones de euros, una cifra más abultada de lo habitual debido al vencimiento de opciones y futuros.