Los responsables de los bancos centrales de los 10 países más ricos del mundo y de otros estados industrializados están reunidos desde ayer en la ciudad suiza de Basilea para analizar el actual endeudamiento de Europa, buscar alguna salida a la creciente crisis de la deuda soberana de varios países y debatir sobre la posibilidad de subir los tipos de cambio ante el incremento de la inflación en Europa (2,2% en noviembre).

La reunión se produce tras un inicio de año marcado por los ataques a la deuda soberana de Portugal, que a la vez ha repercutido en fuertes subidas de la prima de riesgo de España, Italia y Bélgica. Durante el fin de semana, ade- más, se han incrementado las informaciones que apuntan a un posible rescate internacional de Portugal, por la imposibilidad de hacer frente a sus deudas. Entre los países que estarían apretando en este sentido, la revista Der Spiegel apunta a Alemania y Francia.

Tanto el primer ministro portugués, José Sócrates, como el Gobierno alemán negaron ayer que existan estas presiones. El Ejecutivo luso reiteró que no hay razones económicas que justifiquen esa medida. Pero de nuevo ha aumentado la desconfianza en los mercados justo en una semana en la que tanto Portugal como España y otros países de la periferia europea están a punto de lanzar nuevas emisiones de deuda.

El Tesoro español pondrá a prueba el jueves su credibilidad en el mercado de deuda con la subasta de bonos a cinco años, la primera del ejercicio, y la primera también desde que China confirmó su intención de comprar más deuda soberana española.