Todos los bancos españoles superan el test de estrés, así como la mayoría de las cajas de ahorros, exceptuando cuatro grupos de cajas y la cordobesa CajaSur, que requerirían aportaciones adicionales de capital que sumarían 2.043 millones de forma conjunta.

Los grupos de cajas que necesitarían una inyección de capital para afrontar escenarios adversos son el conformado por las catalanas Caixa Catalunya, Caixa Tarragona y Caixa Manresa (1.032 millones de euros), Caja Duero y Caja España (127 millones de euros), Banca Cívica (406 millones de euros), Unimm (270 millones de euros) y CajaSur (208 millones de euros).