El presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Durao Barroso, afirmó hoy que el modelo económico de Chipre "no era viable" y aseguró que Bruselas ayudará a Nicosia a buscar nuevas vías de crecimiento en paralelo a la aplicación del programa de rescate pactado por la eurozona.

"Teníamos que encontrar juntos una solución para un modelo de negocio que no era viable y que no podía ofrecer prosperidad duradera a la población de Chipre", señaló Barroso en una rueda de prensa, en la que subrayó que el rescate ha evitado una "quiebra desordenada" en el país.

El jefe del Ejecutivo comunitario reconoció que la isla tiene por delante "inmensos desafíos", pero aseguró que "puede contar con el apoyo de la Unión Europea", para lo que anunció la puesta en marcha de un grupo de trabajo que se encargará de dar asistencia técnica a las autoridades del país en la aplicación de las reformas.