El BBVA obtuvo un beneficio neto atribuido de 5.020 millones de euros en 2008, un 18,1 por ciento menos que un año antes, aunque su beneficio recurrente (sin extraordinarios) mejoró el 0,2 por ciento, hasta los 5.414 millones, informó hoy el banco. Según la información remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), en este resultado influyó que en 2008 el BBVA se anotó 395 millones de euros menos que un año antes en ingresos extraordinarios, ya que a la venta de la participación en la brasileña Bradesco (509 millones) hay que restar las provisiones por prejubilaciones en España (602 millones) y los 302 millones dotados por las pérdidas que le ocasionó el presunto fraude de Madoff.

Los créditos a la clientela crecieron el 7,1%, hasta los 340.441 millones de euros, con una tasa de morosidad del 2,12%, frente al 0,89% de un año antes, y un índice de cobertura del 91%, frente al 224,8% a cierre de 2007. En esta partida destaca el tímido crecimiento del 1,2% de los créditos con garantía real, que incluyen las hipotecas.

Los depósitos de la clientela, por su parte, se situaron en 267.140 millones de euros tras crecer el 13,1%, y el total de recursos de clientes en balance se situó en 493.324 millones, el 1,6% más. Asimismo, y con motivo de la situación actual, que hace que las entidades actúen con una mayor prudencia, el BBVA comunicó que en 2009 situará su "pay out" (porcentaje del beneficio destinado al dividendo) en el 30% frente al 44,4% de 2007.

El dividendo

También propondrá para sus accionistas la distribución, complementaria a la ya repartida con cargo a los resultados de 2008, de una parte de la reserva por prima de emisión mediante la entrega de unos 60,5 millones de acciones antiguas a razón de una por cada 62, lo que equivale a 0,11 euros, explicó el BBVA.

Todo esto elevará el dividendo total correspondiente al ejercicio 2008 en 0,614 euros por acción, según el banco, que añadió que es precisamente esta estrategia de "prudencia y anticipación" la que le permite obtener "uno de los mayores beneficios de la banca actual" de los presentados hasta el momento.

En cuanto a la solvencia, la entidad destacó que el "core capital" o activos ponderados por riesgo se situó en el 6,2% frente al 5,8% de un año antes, en tanto que el Tier 1 -otro de los ratios que miden la solvencia- mejoró hasta el 7,9% tras la emisión de participaciones preferentes por valor de 1.000 millones de euros realizada recientemente.

Por áreas de negocio, el beneficio atribuido de España y Portugal creció el 10,2%, hasta 2.625 millones de euros, seguida de México, con un beneficio de 1.938 millones y un incremento del 12,1%, y de Negocios Globales, que obtuvo 754 millones, que implicó un retroceso del 15,4%. A continuación, el área de América del Sur logró un beneficio de 727 millones de euros, un 16,6% más, en tanto que Estados Unidos, que integró sus bancos bajo la marca Compass, aportó a las cuentas del Grupo 211 millones, un 3,6% más.

En cuanto a los principales márgenes del negocio, el de intermediación aumentó el 21,7%, hasta los 11.891 millones de euros. El grupo ingresó el año pasado 4.687 millones en comisiones netas por venta o intermediación de productos, que retrocedieron ligeramente, el 0,8%, respecto al año anterior, en tanto que el negocio asegurador aportó unos ingresos de 851 millones, un 16,8% más, lo que supuso un incremento del 10,6% del margen ordinario, que avanzó hasta los 19.126 millones de euros.

Tras restar los gastos en que incurrió el banco en 2008, que sumaron 7.756 millones, ya que los de personal crecieron el 8,8% y los generales de administración, el 11,9%, el margen de explotación -el que mide con mayor fidelidad la evolución del negocio típico de un banco- se situó en 10.552 millones después de elevarse el 8,8%. Con estos datos, el ratio de eficiencia de la entidad, que mide el porcentaje de ingresos que consumen los gastos, se situó en el 38,6%, ligeramente por encima del 38,1 de diciembre de 2007.