Desaceleración y pérdida de empleo. El BBVA prevé que la inversión en vivienda registrará el año que viene un descenso del 3,5%, frente al crecimiento del 3% de este año. Esta evolución del sector supondrá la pérdida de 250.00 empleos en dos años --unos 90.000 en el 2008 y otros 160.000 en el 2009--.
Estos datos se incluyen en el informe sobre la situación inmobiliaria elaborado por el BBVA. El estudio pronostica que el ajuste gradual entre la oferta y la demanda repercutirá en la inversión residencial. No obstante, destaca que muchos de los empleos que se perderán serán absorbidos por otros sectores, como el de servicios. Es por ello que "para el total de la economía se prevé un crecimiento del empleo, en términos de la encuesta de población activa de 291.000, algo menos de la mitad de los estimados para el 2007".
AJUSTE ACOTADO El estudio concluye que la magnitud del ajuste inmobiliario se encuentra acotada "por el buen funcionamiento del mercado laboral, una saneada situación patrimonial de los hogares y un sólido sistema financiero".
La disminución de la inversión inmobiliaria supondrá una contribución negativa directa sobre el crecimiento económico de tres décimas en el 2008, lo que rebaja las perspectivas de la entidad bancaria hasta el 2,6%. Asimismo, la actividad residencial continuará su ajuste hacia un tamaño más acorde con el crecimiento a largo plazo del mercado. Por todo ello, se prevé que cierre el año 2007 con 675.000 visados nuevos y no supere los 500.000 en el 2008.
La caída en el inicio de viviendas en España se traslada a la economía y también al empleo, con hasta dos años de retraso por tratarse en su mayoría de bloques de pisos, que llevan más tiempo de construcción. En cambio, en EEUU o Irlanda, donde casi todas las casas son unifamiliares y más rápidas de edificar, los frenos en la actividad se notan al momento.
PRECIOS A LA BAJA El precio de la vivienda cerrará este año con un crecimiento del 5,5%, que disminuirá hasta el 1,4% en el 2008. A pesar de las turbulencias financieras, que se han agudizado tanto en Europa como en Estados Unidos, el estudio del BBVA prevé un cese de las tensiones de liquidez con el consiguiente descenso del euríbor --la referencia fundamental para las hipotecas-- a finales del 2008.
El informe destaca que el ajuste inmobiliario se seguirá intensificando, "pero con mayores soportes que en experiencias pasadas". Así, la inversión y los precios de la vivienda "se están desacelerando desde hace cuatro y tres años, respectivamente, y mantienen en estos momentos crecimientos todavía positivos".
Según el BBVA, el freno intenso y generalizado de la demanda es más intenso en los pisos de segunda mano. A pesar de las incertidumbres actuales, "el crédito para la compra de vivienda crece y seguirá creciendo a tasas significativas, acompasándose a una demanda que está convergiendo a ritmos de expansión más sostenibles".
