El presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet, admitió ayer que aún no ha pasado "lo peor" de la crisis económica y que las grandes entidades financieras sufrirán una merma de rentabilidad por las turbulencias desatadas por la crisis de las hipotecas basura de EEUU. En su comparecencia trimestral ante el Parlamento Europeo, Trichet descartó un descenso de los tipos de interés debido a las alzas de precios del petróleo y de los alimentos, que han situado la inflación de la zona euro en su nivel récord del 3,3% en febrero.

La lucha contra la inflación es la principal prioridad del BCE en estos momentos y el mantenimiento de los tipos en el 4% es la mejor respuesta para evitar una espiral inflacionista, recalcó Trichet.

Según el informe trimestral sobre la zona euro, los precios del petróleo se mantendrán "muy altos" el resto del año, pero destaca como positivo el aumento de la inversión europea y la evolución del sector industrial de la zona euro.