La decisión del BCE ha pillado por sorpresa a los mercados financieros, que no esperaban un recorte de tipos de interés antes del próximo mes de diciembre. El presidente del BCE, Mario Draghi, ha justificado la decisión por los bajos niveles de inflación registrados en la zona euro y ante el riesgo de "un largo periodo de baja inflación" cuya duración no ha querido precisar. También ha adelantado que el precio oficial del dinero permanecerá en este nivel o por debajo durante "un periodo prolongado de tiempo".
Entre las razones para la rebaja de tipos, Draghi también ha citado la debilidad del crecimiento económico en la zona euro (del 0,3% en el segundo trimestre del año).
Según el presidente del BCE, la decisión adoptada hoy ayudará al crecimiento de la economía. "Esta decisión ayuda al crecimiento del crédito a empresas y hogares", ha dicho. También, según ha explicado, "va a ayudar a los bancos" de la zona euro y en particular "a los bancos sanos en zonas con problemas" pues, según han dicho, les facilitará el acceso a financiación y eso favorecerá el crédito.
la amenaza de la deflación
La inflación en la zona euro se situó en octubre en el 0,7% y ha entrado en zona negativa en algunos países, como España (-0,1% en octubre). El presidente del BCE, sin embargo, ha descartado el riesgo de deflación. "No vemos deflación", ha dicho Draghi, entendida esta como un proceso de caída amplia de precios, durante un periodo prolongado, en un amplio número de bienes y en una cantidad considerable de países, según él mismo ha definido.
Aunque, según el análisis del BCE, la inflación volverá a su nivel de estabilidad (cercano al 2% pero por debajo), Draghi ha respondido a los periodistas que si el nivel de precios siguiera bajando "hay varias instrumentos que podremos movilizar en caso de que sea necesario". Entre su "artillería" disponible, Draghi ha citado la posibilidad de seguir bajando aún más el precio oficial del dinero y de, incluso, cobrar a los bancos por sus depósitos en el BCE (ahora tienen una remuneración del 0%)
Reacción de los mercados
Aunque ha explicado que la apreciación del euro frente al dólar no ha sido tenida en cuenta y que ni siquiera se ha hablado de ello en la reunión, lo cierto es que la cotización de la moneda única ha caído con fuerza tras conocer el anuncio del BCE hasta los 1,33 dólares, frente a 1,35 dólares del inicio de la jornada. La bolsa española reaccionó con una subida del 1,7%, tras haber permanecido en números rojos durante la mañana. La prima de riesgo de España cayó hasta los 232 puntos básicos y la cotización del bono a 10 se situó en el 4,064%.
