No contaban los mercados europeos con un dato de vivienda en Estados Unidos malo, como así fue, lo que dio al traste con el rebote que propició el mensaje del presidente de la Reserva Federal (Fed), Ben Bernanke, sobre que los tipos seguirán bajos aún por algún tiempo. Al final, las principales plazas europeas consiguieron mantenerse a flote, pero no el Ibex 35, que lastrado por los grandes bancos, lideró los recortes en Europa. El selectivo español cerró en los 10.254 puntos, el 0,57% por debajo del cierre del martes tras una jornada de volatilidad y negocio modesto.

Lo más relevante del día fue la presentación del informe semestral de política monetaria por parte de Bernanke ante el Congreso. Se esperaba que su discurso fuera ligeramente optimista desde el punto de vista económico, en línea con la revisión al alza en las previsiones de crecimiento e inflación de la Fed en enero, y que se centrara en la estrategia de salida de su política monetaria expansiva. Bernanke habló tras la apertura de Wall Street y confirmó las expectativas al decir que la economía no puede todavía caminar sola. Pero al final el mercado de Nueva York se movió al alza.

En el mercado español, el protagonismo y el peso de los recortes fue para los bancos por el cambio de recomendación de Barclays. El BBVA y el Santander perdieron más de un punto porcentual, aunque sus recortes llegaron a ser superiores al 2% durante la jornada. No fue un buen día tampoco para Sacyr y OHL: registraron pérdidas superiores al 4%. En el mercado continuo destacó Miquel y Costas, que ganó más del 4% tras presentar resultados. Rindió cuentas también la eléctrica Iberdrola, en línea con las previsiones, lo que le permitió repetir la cotización del día anterior.

La rentabilidad de la deuda española a largo plazo bajó dos centésimas y se situó en el 3,89%, mientras que el efectivo negociado en el mercado continuo bajó a 2.422 millones de euros.