China ha marcado un día más la sesión bursátil. Por una parte, su Gobierno ha previsto que la segunda economía del mundo crezca este año entre el 6% y el 6,5%, algo por debajo del 6,6% del año pasado. Pero por otro, ha anunciado nuevas medidas de impulso económico para frenar la desaceleración. A ello se han sumado unos datos de actividad en el sector manufacturero de la zona euro mejores de lo anunciado inicialmente. A falta de novedades sobre las negociaciones comerciales entre el gigante asiático y Estados Unidos y sobre el 'brexit', estos estímulos han bastado para que las bolsas europeas se apuntaran subidas moderadas. La excepción una vez más ha sido la española, que sigue atascada en torno a los 9.250 puntos. El Ibex 35 ha caído ligeramente (0,02%) atrapado en una resistencia que no consigue batir por falta de catalizadores.