Euforia en los mercados y prevención entre los analistas. La decisión de la Reserva Federal (Fed) de EEUU de recortar los tipos de interés medio punto produjo reacciones contradictorias ayer en los mercados financieros. Por un lado, las bolsas reaccionaron con un optimismo sin matices en Europa, tras comprobar que Wall Street subió el 2,5% la víspera: los mercado continentales se anotaron repuntes de entre el 2,5% y el 3,6%%, entre ellos, el Ibex 35 de la bolsa española que anotó la mayor subida del año, con un 3,3%.

Por otro lado, los analistas interpretaban que la Fed ha ido más allá de donde las señales de alerta daban a entender. "Se esperaba una bajada de un cuarto de punto. Un descenso mayor da a entender que la Fed tiene datos sobre la economía que los demás no conocemos o, por el contrario, ha sobreactuado para frenar una crisis que no exigía tanto", comentó Antonio Villaroya, analista de renta fija de Merrill Lynch en Londres. "Aunque es verdad que no se sabe aún todo lo que esconde la crisis de las subprime ", añadió.

En todo caso, el cambio en la política monetaria de EEUU no parece haber incidido directamente sobre el problema. "Los mercados de deudas no han cambiado mucho, aunque es verdad que se mueven con más lentitud", reconoció ayer el responsable de análisis de Riva y Garcia, Manuel Montesinos.

Más específicamente, Peter Dixon, analista de Commerzbank, señaló que "la Fed ha inyectado un chute en el brazo del mercado financiero. Pero los problemas en el mercado del crédito no van a desaparecer por el recorte de tipos", lo que abunda en la idea de que la trascendencia de la crisis aún está por ver.

INYECCIONES DE DINERO De hecho, los bancos centrales todavía se ven obligados a inyectar liquidez en el mercado financiero. El Banco de Inglaterra planea llevar a cabo la próxima semana una subasta de fondos por importe de 10.000 millones de libras esterlinas (14.322 millones de euros) con vencimiento a tres meses, que será seguida de otras tres operaciones.

El más claro efecto de la bajada de tipos se ha observado, pues, en las bolsas mundiales, lo que responde a la lógica de los mercados: "las bolsas reaccionan siempre al alza con los tipos a la baja y con la mejora de los beneficios", comentó Montesinos. La primera premisa se cumplió ayer, la segunda se verá cuando en octubre se conozcan los resultados empresariales del tercer trimestre. Pero algunos datos anticipan que no serán malos. Las empresas que integran el Ibex 35 ganaron 24.700,81 millones de euros en el primer semestre del año, lo que supone un incremento del 33,21% respecto a los que lograron en el mismo periodo del año anterior, según datos remitidos por las compañías a la Comisión Nacional del Mercado de Valores. Además, la decisión de la Fed deja al Banco Central Europeo con menos argumentos para mantener la política de tipos al alza. "No podrá subir los tipos, a menos que quiera que el euro llegue a 1,50 dólares", comentó Villarroya. Ayer, la moneda única alcanzó un récord absoluto en 1,397 dólares, según el cambio oficial del BCE.

Un euro en máximos dificulta que las economías exportadores de la zona euro mantengan su ritmo de crecimiento por la vía del comercio exterior.