La Comisión Europea abrió ayer un proceso por déficit excesivo contra Portugal por considerar que la situación económica en la que está no puede ser calificada de "carácter excepcional". Para Bruselas, la cifra de 6,83% del déficit público, anunciada hace un mes por José Sócrates, primer ministro luso, no se debe a "un acontecimiento imprevisto" que escape al control del Gobierno, ni a la "desaceleración grave de la actividad económica del país".

Por esta razón, la Comisión Europea ha elaborado un documento para establecer las medidas y plazos que lleven a reducir el déficit portugués hasta el límite del 3% del producto interior bruto (PIB) y la deuda pública al 60%, como establece el pacto de estabilidad. La deuda también supera lo permitido y es del 66%.

El Ministerio de Finanzas portugués divulgó ayer un comunicado en el que desvalorizaba el anuncio de Bruselas: "no es una novedad". Ante la acción de la Comisión, el Ejecutivo luso se defendió diciendo que en el documento que envió "ya se preveía la reducción del déficit durante los próximos años".

La Administración que preside José Sócrates pretende reducir el déficit público en seis décimas hasta el final del año con la subida de los impuestos indirectos: gasolina, tabaco e IVA. Estas medidas entran en vigor el 1 de julio.

FRANCIA SE RALENTIZA Mientras, ayer se supo que la economía francesa crecerá este año un 1,5%, un ritmo ralentizado por la carestía del petróleo y sobre todo por la debilidad de las exportaciones, debido a la baja demanda de Alemania, Italia y el Reino Unido, principales socios comerciales.