La Comisión Europea autorizó ayer la compra de los negocios en España y Portugal de United Biscuits --propietario de marcas de galletas como Artiach y Fontaneda, con factorías en Mérida, Montijo y Don Benito-- por parte del grupo estadounidense Kraft tras constatar que la operación no tendrá un impacto negativo sobre la competencia. Con esta adquisición por valor de 839 millones de euros, Kraft duplicará su tamaño en la Península, donde contará con más de 2.000 empleados y 11 plantas.

El Ejecutivo comunitario recibió la notificación de la compra el pasado 25 de julio y la examinó a través del procedimiento simplificado, que se aplica a los casos menos problemáticos.

Kraft ya controla los negocios que va a adquirir a través de un sistema de derechos de veto, incluyendo el derecho a nombrar a tres miembros de consejo y a vetar el presupuesto anual y el nombramiento de directivos. Como resultado de la transacción, la estadounidense mantendrá el control exclusivo sobre United Biscuits Iberia y renunciará al derecho de veto sobre el resto de negocios de United Biscuits.

Tras la adquisición, Kraft sumará a sus actuales plantas de España, entre las que se encuentran las tres pacense, una plantilla de 1.300 trabajadores.