La Comisión Europea propuso ayer a los Veinticinco crear un fondo de ayuda a los trabajadores y a las regiones afectadas por procesos de reestructuración empresarial de la UE. El objetivo es dotar ese fondo con 11.300 millones de euros (más de 1,8 billones de las antiguas pesetas) para el periodo 2007-2013, según explicó el comisario de Empleo, Vladimir Spidla.

Ante la competencia mundial y los cambios económicos, el Ejecutivo comunitario estima que la UE necesita dotarse de un instrumento financiero efectivo para ayudar a paliar los efectos negativos de la globalización. El nuevo fondo serviría para preparar anticipadamente los procesos de reestructuración industrial que se produzcan, para facilitar la recolocación de los trabajadores afectados y para mantener la cohesión social.

SECTOR TEXTIL Sometido a una gran presión económica por la avalancha de productos chinos de bajo precio, el sector textil, podría ser uno de los primeros en requerir un apoyo de este tipo para amortiguar los ajustes industriales en Europa, según Spidla. La prosperidad y el bienestar de la UE dependerá de su capacidad de adaptación a las mutaciones socioeconómicas y de la buena gestión de los procesos de reestructuración, dijo Spidla.