La familia Carceller, principal grupo inversor de la firma cervecera española Damm, ha aumentado su participación en la compañía hasta el 40,8% del capital, tras llegar a un acuerdo con la empresa belga Interbrew Belgium (InBev), que hasta ahora controlaba el 12,02% de las acciones de la compañía española.

Según datos de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la firma belga ha cedido a los miembros del consejo de administración de la cervecera 3,5 millones de acciones, que equivalen al 8% del capital. Con esta operación, la familia Carceller se deshace de un incómodo miembro del consejo de administración, que ha mantenido discrepancias con la dirección de la compañía.