Los productores de leche y los grandes distribuidores comerciales andan a la greña en Alemania. Los primeros, que empezaron una huelga por los bajos precios el pasado martes en Alemania, vaticinaron ayer que este fin de semana ya no habrá leche en los súper. Los comerciantes les respondieron que no debe cundir el pánico entre los consumidores, porque hay suficiente producto en los estantes y en las cámaras refrigeradoras para superar el fin de semana. La protesta de los productores se está extendiendo a otros países, como Austria, Holanda, Bélgica y Suiza.