La carga fiscal de las familias se ha multiplicado en la última década, a través del trabajo y el consumo, mientras que la de las empresas se ha reducido a la mitad desde el 2007. En su último informe, El dinero que no ves. Paraísos fiscales y desigualdad, Oxfam Intermón atribuye esta evolución a los paraísos fiscales, el fraude y la rebaja del impuesto de sociedades.

Este estudio destaca que el esfuerzo fiscal de las familias ha pasado del 73,88% en el 2007, el año antes de que estallara la crisis, al 83,29% en el 2016, casi 190 puntos más. Por su parte, el de las empresas ha caído durante el mismo periodo del 22,34% al 11,64%, casi a la mitad, según el informe de esta oenegé.

Los autores del estudio dicen que la inversión española hacia paraísos fiscales se cuadruplicó entre 2015 y 2016, y que «uno de cada cuatro euros» se dirigieron hacia estos territorios de baja o nula fiscalidad. Este hecho lo constatan otras investigaciones, como la del Observatorio de Responsabilidad Social Corporativa.

Otro elemento es la bajada del impuesto de sociedades, cuya recaudación se ha reducido en 23.000 millones de euros desde el 2007 en España, a pesar de la recuperación económica y de los beneficios empresariales en los últimos años. El Estado ingresó con este gravamen en el 2016 «el 52% menos de lo que ingresaba antes de la crisis, mientras que la recaudación del resto de impuestos ha recuperado los niveles precrisis», constata el estudio. Según Oxfam Intermón, «harían falta tan solo 12.000 millones de euros para pagar la renta mínima a todas las familias que en la actualidad no tiene ingresos».

UN PAÍS DESIGUAL / El director general de la oenegé, José María Vera, destaca que en España «tenemos una brecha de recaudación de seis puntos frente al resto de los países del euro». A su juicio, no se puede renunciar «a recaudar lo que en justicia corresponde pagar a las grandes empresas, porque eso supone dejar en la cuneta la lucha contra la desigualdad y, con eso, a millones de personas». España, de hecho, según otros informes de esta organización, «es el país de la UE en el que más ha crecido la desigualdad, después de Chipre».

Desde el 2008, España ha sido el segundo país de la UE donde más ha crecido la desigualdad de renta, 20 más que el promedio europeo, se subraya. «Esto deja a las familias y las personas más golpeadas por la crisis en una situación que contradice el optimismo en torno a los principales datos macroeconómicos». Gran parte de esta evolución se debe a que son las familias «sobre quienes ha recaído una gran parte del peso de la crisis y sobre las que recae de forma creciente el sostenimiento del sistema público».

Según Oxfam, se necesita una ley de evasión fiscal, que debería incluir «una definición sobre paraísos fiscales vinculante». A la vez se tendría que lograr que el tipo efectivo de tributación de las grandes empresas «se acerque al tipo nominal en vigor y supere la presión fiscal que soportan las pymes». Otra herramienta sería una reforma en profundidad del sistema fiscal internacional

En todo caso, la reducción del peso tributario de las empresas en detrimento de las familias «es un fenómeno global». Y no es de extrañar porque la inversión mundial hacia paraísos fiscales ha aumentado el 45% en menos de 10 años.