La Casa del Rey aplicará en sus retribuciones salariales ajustes en línea con los que se acuerden para los correspondientes niveles de la Administración, según han informado hoy a Efe fuentes de esta institución.
Las mismas fuentes han recordado que Zarzuela no está sujeta a la regulación retributiva de la Administración, pero desde hace muchos años aplica una política presupuestaria acorde con la del conjunto de los organismos públicos estatales.
Con el objetivo de contribuir a las exigencias de austeridad económica, la Casa del Rey solicitó al Gobierno antes del pasado verano que no aumentara su asignación anual en el 2010, de modo que la partida presupuestaria correspondiente a esta institución se mantiene congelada en 8,89 millones de euros.
INDEPENDENCIA DE LOS OTROS ÓRGANOS
La Casa del Rey, creada para facilitar al jefe del Estado el cumplimiento de sus funciones constitucionales y posibilitar su independencia respecto de los otros órganos del Estado, no forma parte de ninguna Administración pública.
La ley de presupuestos generales del Estado establece para cada ejercicio una asignación global para la Casa del Rey y corresponde al Monarca distribuir libremente su importe, destinado a atender los gastos de funcionamiento y de personal a cargo directo de esta institución, así como el sostenimiento económico de la familia real, según explica en su propia web.
LOS PRESUPUESTOS GENERALES DEL ESTADO
Las retribuciones del jefe de la Casa, del secretario general, del jefe del Cuarto Militar y del personal de dirección "se corresponden, respectivamente, con las asignadas en los presupuestos a los ministros, secretarios de Estado, subsecretarios y directores generales".
Por este motivo, cada año la Casa del Rey aplica a estas retribuciones el mismo tratamiento que se determina en los presupuestos generales del Estado para los sueldos de altos cargos equivalentes de la Administración.
El personal contratado y los funcionarios procedentes de la etapa anterior a la creación de la Casa también perciben sus retribuciones con cargo a la dotación presupuestaria global que las Cortes aprueban cada año para esta institución, mientras que los demás funcionarios de carrera y los eventuales las perciben con cargo al Ministerio de la Presidencia.
