La Generalitat creará un impuesto con el que pretende gravar los pisos vacíos de la banca y los promotores con el fin de incentivar el alquiler.

El conseller de Territorio y Sostenibilidad, Santi Vila, ha anunciado que esta medida se incluirá en la ley de Acompañamiento de los Presupuestos de la Generalitat para 2013 y ha admitido, en declaraciones a Rac-1, que la tasa generará "controversia", por lo que se deberá definir bien.

El acuerdo de legislatura entre CiU y ERC ya recogía la posibilidad de "estudiar la aplicación de medidas impositivas o medidas de otra índole para incentivar la entrada en el mercado de alquiler de las viviendas desocupadas propiedad de sociedades mercantiles".

Vila, que no ha cifrado cuánto espera recaudar el Govern por esta vía, ha precisado que la tasa a las viviendas vacías será proporcional al número de pisos que tengan desocupados, y ha dejado claro que este impuesto no afectará a particulares.

La Generalitat tiene localizados unos 70 municipios donde existe una demanda acreditada de pisos y, en cambio, se acumulan las viviendas vacías; la idea del gobierno catalán es gravar allí los pisos desocupados de personas jurídicas, pero bonificarles luego esa cantidad si los ponen en alquiler.

Vila ha comentado que Cataluña "no puede permitirse" tener a miles de familias afectadas por los desahucios y un parque de viviendas desocupadas, entre nuevas y de segunda mano, que puede alcanzar las 350.000 o las 400.000.