Con la negociación de los ertes altamente encarrilada, CCOO mira ya hacia el siguiente capítulo que tiene pendiente el diálogo social: el salario mínimo interprofesional (SMI). El secretario general de la central, Unai Sordo, ha instado este miércoles al Gobierno a no esperar a tener el beneplácito de la patronal para plantear una subida. Pues las perspectivas de alcanzar un entente con CEOE son, a su parecer, muy escasas: No va a haber acuerdo, ha declarado este miércoles en rueda de prensa.

La revisión del SMI es un asunto que el Gobierno, debido a la falta de acuerdo tanto en su seno como en el marco del diálogo social, dejó congelado el año pasado. El compromiso del Ministerio de Trabajo, no obstante, es sacar de la nevera este asunto y se resiste, pese a las voces de vicepresidentas como Nadia Calviño o Carmen Calvo, a hacer permanente la congelación del SMI para todo el 2021. Este suelo base salarial se quedó en los 950 euros, tras quedar prorrogado en el último Consejo de Ministros del 2020.

Díaz se comprometió a volver a abordar este tema con patronal y sindicatos en el mes de enero. No obstante, el secretario general de CCOO ha avisado al Gobierno de que no se escude en la falta de acuerdo dentro del diálogo social para tapar su desacuerdo interno. "No va a haber acuerdo con la patronal, que sepa el Gobierno que esa patata no se puede resolver, en esta coyuntura, desde el diálogo social", ha manifestado Sordo.

Primero reforma laboral, luego estabilizar los ertes

Sordo no solo ha instado al Ejecutivo a tirar adelante con la subida del SMI sin el consenso de la patronal, sino que también le ha marcado ese mismo camino para abordar su contrarreforma laboral. "Si no hay acuerdo, tiene que haber acción de Gobierno. Es la mejor manera de incentivar los acuerdos", ha declarado el líder de CCOO; que ha lamentado el "poder de veto" 'de facto' que hasta ahora se le ha concedido hasta ahora a CEOE en las mesas del diálogo social.

El pasado lunes, la ministra de Trabajo mantuvo una reunión semipresencial con los máximos representantes del diálogo social, para intercambiar prioridades de cara a la agenda de reformas de este 2021. En esa lista, el orden que pretende CCOO es abordar primero parte de la contrarreforma laboral a la que se comprometió el Gobierno en su programa de coalición; para luego pasar a estabilizar un nuevo modelo de ertes en el marco de relaciones laborales español. Y hacerlo de manera ordenada y sin abrir ningún tema antes de haber cerrado el precedente. Pues sino, en opinión de Sordo, corren el riesgo de "mezclarlo todo y que no salga nada".

En este sentido, Sordo ha considerado que reiniciar las conversaciones sobre la derogación parcial de la reforma laboral mandaría un mensaje a la ciudadanía de que se está en disposición de "salir del túnel", tras la excepcionalidad del covid. Y ahí CCOO y UGT coinciden en reabrir los debates que la pandemia interrumpió en febrero, que versaban sobre recuperar la ultraactividad y la prevalencia del convenio sectorial sobre el de empresa.

CCOO rechaza parte de la reforma de pensiones de Escrivá

El secretario general de CCOO ha reiterado su rechazo a la propuesta que prepara el ministerio dirigido por José Luís Escrivá para elevar el cálculo de las pensiones de 25 a 35 años cotizados. "Muchos trabajadores no van a tener ni 35 años cotizados. No compartimos esa medida", ha declarado. Punto en el que coinciden con Unidas Podemos. La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha reiterado en múltiples ocasiones que su formación no apoyara parlamentariamente dicha reforma. Desde CCOO si ven con mejores ojos la propuesta de Escrivá para revalorizar el importe de la pensiones. "A priori, sí parece que garantiza el poder adquisitivo", ha manifestado Sordo.