Los sindicatos reactivan su agenda de movilizaciones para urgir al Gobierno a que retome su agenda de reformas en materia laboral y de pensiones, interrumpida esta por la pandemia. CCOO y UGT han convocado el próximo 11 de febrero concentraciones en las principales ciudades de España para presionar al Ejecutivo para reiniciar la derogación de parte de las reformas laboral y de pensiones heredadas del PP. Así lo han presentado sus máximos dirigentes en una rueda de prensa este martes, en la que también le han pedido al Ejecutivo una propuesta inmediata para subir el salario mínimo, un tema sin resolver desde el 2020.

"Ahora sí que toca", ha declarado el secretario general de UGT, Pepe Álvarez. "Queremos fechas y mesas", le ha exigido al Gobierno su homólogo de CCOO, Unai Sordo. Las centrales aprietan para retomar la derogación parcial de la reforma laboral del PP, la contrarreforma laboral del Gobierno de coalición o la sustitución, como se ha referido este martes Pepe Álvarez. La semántica ha ido cambiando con los años, desde aquel 2012 en el que Mariano Rajoy aprobó su nuevo esquema de relaciones laborales, pero las centrales urgen para materializar de forma inmediata los primeros cambios. "En función de como evolucionen las cosas veremos si el proceso de movilización se acentúa", ha declarado el líder de CCOO.

El próximo 11 de febrero a las 12h de la mañana frente a las delegaciones del Gobierno de las principales ciudades del país. Así dan los sindicatos el pistoletazo de salida a un calendario de movilizaciones con las que aspiran a presionar al Gobierno para acelerar su calendario y que los sectores más conservadores dentro del mismo no rebajen los compromisos del acuerdo de coalición. Tampoco bajo el argumento de que la Unión Europea exige cambios, condicionados a la llegada de fondos europeos. "No vamos a admitir a un tercero en la negociación", ha declarado el líder de UGT.

"Estabilidad", "limitar el recurso al despido" y "flexibilidad interna pactada", son las prioridades que ha enumerado el secretario general de CCOO, Unai Sordo. Es decir, el primer bloque de reformas que estaba sobre la mesa en marzo del 2020 antes de la irrupción de la pandemia. Lo que pasa por reformar la ultraactividad y recuperar la primacía del convenio sectorial sobre el de empresa. "Preferimos los acuerdos que los desacuerdos", pero no aceptarán que el Ejecutivo de "poder de veto" a la patronal, según ha manifestado Sordo.