El sindicato UGT ha exigido a Caja Madrid que no haga un uso político de su posición en Iberia, mientras que CCOO demanda a la entidad que aclare cuáles son sus intenciones sobre la aerolínea. El secretario general del sector aéreo de UGT, Alberto Garrido, reclamó ayer que el 24% de participación que posee la caja madrileña no tenga un uso diferente de la inversión financiera. "No nos gustaría que lo de Caja Madrid termine siendo una operación financiera con tintes políticos que nos acabe llevando a problemas territoriales", dijo.

Explicó a este respecto que UGT aboga por el crecimiento de Iberia en Madrid y en Barcelona, y no por mejorar en Barajas a costa de El Prat. Además, Garrido pidió a la entidad financiera que "no bloquee la entrada de un socio industrial, en referencia a las grandes aerolíneas europeas, que pueda dar más valor al negocio".

El portavoz de la federación de transporte de CCOO, Javier Jiménez, exigió a la entidad que aclare si apuesta por impulsar un proyecto industrial en Iberia o si, por el contrario, su hegemonía en el accionariado de la aerolínea persigue obtener fines meramente especulativos.