Los secretarios generales de CCOO y UGT, José María Fidalgo y Cándido Méndez, han tardado poco en responder al presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, que dijo que no era un buen momento para negociar el alza del salario mínimo interprofesional (SMI). El Gobierno prometió llegar a los 800 euros al mes.
Méndez recordó que la elevación de los salarios es un factor positivo para el crecimiento económico y "no tiene ningún elemento negativo". En cambio, a Fidalgo no le preocupan las declaraciones de Díaz Ferrán porque ha firmado la renovación del Acuerdo interconfederal de Negociación Colectiva que fija los procedimientos para subir los salarios en el 2008.
