La Comisión Europea confía en alcanzar una solución global sobre Grecia antes de final de mes, que permita desbloquear el siguiente tramo de ayuda internacional de manera que su Gobierno pueda afrontar los compromisos de pago que vencen a mediados de julio, según informaron hoy fuentes comunitarias. Los ministros de Finanzas de la zona euro celebraron ayer una conferencia telefónica en la que comenzaron a debatir nuevas ayudas a Grecia, más allá del rescate de 110.000 millones concedido en mayo de 2010, así como la modalidad preferida para involucrar a los acreedores privados. El presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, dijo hoy que el importe del nuevo plan de ayuda para Grecia aún no se ha fijado, un día después de que el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schäuble, dijera que el coste de salvar a la maltrecha nación ascenderá a 90.000 millones de euros. "Es demasiado pronto para anunciar cifras definitivas", dijo Juncker a la prensa en Luxemburgo, en declaraciones recogidas por EFE Dow Jones. Schäuble expuso ayer a sus homólogos la propuesta que les había anticipado previamente en una carta, en la que aboga porque los tenedores de bonos griegos acepten prorrogar durante siete años los vencimientos, lo que daría tiempo a Grecia para reordenar sus maltrechas finanzas públicas. La CE es favorable a un enfoque más suave, que no sea considerado como un "impago de facto" por los actores del mercado, y que podría consistir en que los acreedores suscriban deuda nueva a medida que caduca la que tienen en cartera, de manera voluntaria, según se interpreta de unas declaraciones efectuadas ayer por el comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn. El Banco Central Europeo (BCE) -uno de los principales acreedores de Grecia junto con los bancos griegos, alemanes y franceses, entre otros- ha expresado su rechazo a medidas que suenen a reestructuración y que puedan llevar a las agencias de calificación a declarar un impago. El presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, reiteró hoy en Fráncfort su oposición a toda reestructuración de la deuda griega. "Sería un enorme error aprobar una decisión que pudiera desencadenar un impago de la deuda griega", afirmó Trichet en rueda de prensa tras la reunión mensual de política monetaria del BCE. La "fecha clave" para abordar el problema griego será el 20 de junio próximo cuando los ministros de Finanzas de la zona euro se reunirán en Luxemburgo, aunque el asunto podría colarse en la discusión en una cena de trabajo previa que mantendrán el martes en Bruselas. Fuentes cercanas a la reunión de ayer aseguraron que aún es pronto para determinar la cantidad que alcanzará el segundo rescate de Grecia, aunque la prensa especula con la posibilidad de que se sitúe entre los 80.000 y 100.000 millones, para cubrir sus necesidades de financiación hasta 2014 (el programa actual finaliza en 2013 aunque el país debería comenzar a regresar al mercado en 2012).