La Comisión Europea aseguró ayer su disposición a ser "flexible" y a estudiar la posibilidad de que la reforma del sector de frutas y hortalizas admita un periodo de transición antes del final de las ayudas a la transformación, tal y como propusieron países productores como España y los nuevos Estados miembros.

"Voy a examinar la posibilidad de un periodo de transición", afirmó la comisaria de Agricultura, Mariann Fischer Boel. No obstante, puntualizó que "tendrá que ser muy breve" y su "objetivo final" debe ser la "desvinculación completa" de la ayuda a la transformación.

Fischer Boel confió en que la UE pueda encontrar un acuerdo sobre las subvenciones del nuevo sector al término del debate que celebró ayer con los ministros europeos de Agricultura. Se trata de la segunda ocasión que los Estados discuten a nivel ministerial sobre la propuesta de reforma de la Comisión. Según lo previsto, se espera alcanzar un acuerdo en junio para que la reforma entre en vigor en el 2008.

En dicha reunión, la Presidencia alemana pidió la opinión de las delegaciones sobre la pretensión de la Comisión de que las ayudas vinculadas a la transformación de frutas y hortalizas se eliminen desde el primer momento. Tal y como explicó Fischer Boel, hay un "amplio consenso" entre los Estados miembros acerca de que las ayudas tienen que terminar, pero con "diferencias" relativas a cuándo.

Por su parte, fuentes del Consejo Europeo corroboraron que el principio del final de las ayudas es respetado en general, pero "a condición de que haya una transición", que los países consumidores apuestan porque sea "muy corta" y los productores como España y los nuevos Estados miembros defienden que sea "razonable", fijando el 2013.

SECTORES SENSIBLES Las fuentes añadieron que hay delegaciones que defendieron que para los "sectores más sensibles" se instaure un "sistema mixto", que consistiría en un pago único vinculado a que contratos con la industria. Los productos difieren por países, pero en el debate de ayer los más mencionados fueron los cítricos, los tomates, las ciruelas, las pasas y los frutos rojos. En este punto, Espinosa se posicionó a favor de que la propuesta contemple medidas transitorias, "en particular para el tomate y los cítricos".