Los mercados se esperaban lo peor, pero al final no fue para tanto. Citigroup --el mayor banco de Estados Unidos y uno de los principales afectados por la crisis actual de las hipotecas basura-- anunció ayer que en el segundo trimestre de este año ha vuelto a registrar pérdidas millonarias, aunque menores de lo que se temían los analistas. La entidad estadounidense perdió 1.575 millones de euros entre abril y junio, lo que supone un fuerte batacazo frente a los 3.929 millones que ganó en el mismo periodo del año pasado, pero este es un resultado menos malo de lo que auguraba el consenso del mercado (2.210 millones de euros en pérdidas). Los inversores le premiaron con una revalorización bursátil de más del 10%.

La otra cara de la moneda fue Merrill Lynch, que anunció un resultado negativo de 2.932 millones en el mismo periodo, frente a los 1.324 millones que ganó el año pasado. Las acciones del banco se dejaron en torno al 2,5% de su valor en la sesión bursátil.