El consejo de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) aprobó ayer reducir el 25% de media los precios de los servicios de banda ancha mayorista que ofrece Telefónica a otros operadores. Son las prestaciones denominada de acceso indirecto o, técnicamente, bistream.

Esta modalidad es imprescindible para que los operadores alternativos a la compañía dominante en el mercado puedan ofrecer ADSL en todo el territorio y competir al mismo nivel con Telefónica. La CMT ha constatado que en los lugares donde los operadores alternativos no están alojados en las centrales de Telefónica existe menor competencia. Y eso se produce porque los servicios indirectos suponen mayores costes para el nuevo operador que no tiene más remedio que repercutir en el cliente final.

El organismo regulador recortó también el 31,1%, hasta los 2,06 euros, el precio mayorista de alquiler mensual del bucle de abonado compartido. En esta modalidad, el servicio de voz lo presta Telefónica, mientras que el operador alternativo ofrece a sus clientes la banda ancha y alquila solo la parte del bucle que usa el espectro de frecuencias de banda no vocal.