La comisión permanente del Comité de Empresa de General Motors (GM) en Figueruelasha acordado hoy no decantarse oficialmente por ninguna de las ofertas que se han presentado para hacerse con el negocio europeo de GM, pero reconoce que la presentada por RHJ es "menos agresiva" que la de Magna.

La comisión permanente, reunida hoy por primera vez después de las vacaciones de verano, ha analizado las últimas informaciones relacionadas con las ofertas presentadas por el fabricante de componentes canadiense-austríaco Magna y la firma RHJ International, filial del fondo de inversión estadounidense Ripplewood, quienes han remitido a General Motors sus ofertas mejoradas. El presidente del Comité de Empresa, José Juan Arcéiz, ha explicado a Efe que después de analizar estas dos propuestas se ha acordado que no se posicionan a favor de ninguna de las dos, pero sí que reconoce que es "evidente" que la que defiende RHJ es "menos agresiva" para Figueruelas.

En cualquier caso, ha asegurado que los representantes de los trabajadores apoyarán "al inversor que venga con un proyecto basado exclusivamente en cuestiones industriales y económicas". Ha recordado, además, que quien tiene que tomar la decisión final es la propia matriz automovilística en Detroit, pero debe de hacerlo "sin dejarse influir por quien más dinero ponga y por cuándo lo ponga".

La solución a la venta de las nueve plantas que GM tiene en Europa y varias de componentes, con un total de 52.000 empleados, más de 7.500 en Figueruelas, "debe de venir de Europa" con el objetivo de que se controle el dinero público que se destine a la multinacional y se evite el "dumping" social.

El Comité de Empresa duda que la decisión final de GM se conozca esta semana y ni siquiera la próxima, pero ha insistido en que lo "fundamental" es tener un comprador. Los representantes de los trabajadores se muestran dispuestos a negociar cualquier salida para la empresa, siempre basada en "criterios socialmente aceptables", ha destacado el representante sindical.