Cómodas e inmediatas, sí, pero demasiado caras. Es la conclusión que acerca de las tiendas de las gasolineras extremeñas extrae la revista Consumidorex, editada por la Unión de Consumidores de Extremadura (UCE), tras realizar un estudio sobre el precio al que se venden diferentes artículos en estos establecimientos.
El informe se ha realizado en un total de 56 estaciones de servicio repartidas por diversas carreteras nacionales y autovías que atraviesan la región. Y las conclusiones son claras: las diferencias que hay entre estos establecimientos y un supermercado convencional pueden sobrepasar el 150%. Para llegar a este resultado se han tomado como referencia once productos considerados de consumo frecuente entre quienes compran en estas tiendas, como patatas fritas de varias marcas, refrescos, aguas y caramelos. A ellos se han sumado también dos artículos que hay que llevar por obligación en el coche: el chaleco reflectante y los triángulos de emergencia.
Según el informe de Consumidorex, seis de estos trece productos se venden en las gasolineras a más del doble de lo que cuestan en un supermercado o una tienda común y únicamente dos están por debajo del 50% de diferencia. "A pesar de la comodidad que supone comprar en una gasolinera que nos viene de paso en nuestro viaje, el precio de estos productos es tan alto que desaconseja absolutamente esta práctica", se asegura en la revista, que destaca también que entre las diferentes tiendas de las estaciones pueden encontrarse "diferencias abismales" dentro de un mismo producto.
Como ejemplo de ello, se pone un ejemplo: alguien que para a comprar unas patatas fritas, una bebida, un dulce y unos caramelos de eucalipto. Si tiene suerte y se detiene en la gasolinera más barata pagará 4,15 euros. Si lo hace en la más cara, 9,15 euros. La media de esta comida improvisada será de 5,64 euros, un 70% más que los 3,31 que valdría en un supermercado. "En consecuencia, lo más aconsejable sin ningún género de dudas, es anticipar nuestras necesidades en el viaje que vamos a realizar y, si es necesario, llevar esos productos en el coche antes de salir de casa".
El vicepresidente de la Asociación de Empresarios de Estaciones de Servicio de Extremadura, Miguel Monedero, apunta por su parte que "si una cerveza te cuesta un euro en una gasolinera, ¿cuánto te vale en un bar?, pues el doble, y te la dan igual de fría que nosotros, no como en un supermercado".
Además, pide que no se generalice ya que, en las gasolineras de las autovías y las carreteras nacionales, que son las que comprende el estudio, "es donde más caro se vende". En cualquier caso, argumenta, "Nosotros también tendremos que sacar algo de beneficio para poder mantener a nuestros trabajadores ¿no?", concluye.
