Después de tres años de batallas legales, el Tribunal de Defensa de la Competencia (TDC) ha resuelto que las entidades emisoras de tarjetas de crédito --Servired, 4B y Euro 6000-- deberán recalcular las llamadas tasas de intercambio, que sirven como base para fijar las comisiones que cobran a los comerciantes por el uso en sus establecimientos de tarjetas de crédito como medio de pago.

El TCD entiende que las fórmulas que aplican Servired, 4B y Euro 6000 para fijar las tasas de intercambio no responden a los costes reales que asumen las entidades bancarias de las que dependen. Una de las afectadas, Servired, se comprometió ayer a estudiar la resolución del tribunal.