La confianza de los consumidores y empresarios mejoró en junio por tercer mes consecutivo tanto en la UE como en la zona del euro, informó hoy la Comisión Europea, que destaca que, a pesar de ello, ésta continúa en un nivel muy bajo. El Indicador de Sentimiento Económico (ISE) que elabora el ejecutivo comunitario creció en junio 3,1 puntos en los países de la moneda única, hasta 73,3 puntos, y 3,2 puntos en la UE, hasta 71,1 puntos.

España, que en abril había registrado una mejora significativa del índice (4,1 puntos), ha continuado en junio con la misma tendencia de incremento moderado de mayo (1,5 puntos más) y así volvió a avanzar otro 1,5 puntos, hasta 75,1. La mayoría de Estados miembros registraron avances de la confianza y, entre las grandes economías, destaca el progreso en Alemania (3,2 puntos) y Reino Unido (2,7 puntos), en tanto que Holanda (1,5) e Italia (1,1 puntos) tuvieron mejoras más limitadas. El incremento de la confianza fue resultado de la clara mejoría entre los consumidores y en el sector de los servicios, que tanto en la zona del euro como en los Veintisiete subió 3 puntos.

Pero las perspectivas en la construcción se mantuvieron sin cambios en ambas zonas y el sector minorista también siguió estable en la UE, mientras que en los países de la moneda única bajó 2 puntos. En España, después del considerable aumento de 9 puntos registrado en la construcción en mayo, la confianza en este sector volvió a caer en junio 3 puntos y el sector minorista, donde la confianza también había subido en 7 puntos en mayo, ha permanecido estable.

En cambio, la confianza de los consumidores españoles y en los servicios experimentó sendas subidas de 3 puntos, mientras que la industria registró una leve mejoría de 1 punto. El ejecutivo de la UE atribuye la mejora de la confianza en junio a que los principales actores económicos parece que confían en que la gravedad de la crisis está disminuyendo.

Por otra parte, el Indicador de Clima Empresarial (ICE), que también facilitó hoy la Comisión Europea, registró en junio un ligero avance, aunque Bruselas insistió en que la mejora fue modesta y que aún sigue muy por debajo de los niveles históricamente bajos registrados en 1993. Esto anticipa, en su opinión, una nueva caída interanual de la producción industrial en mayo, y la continuidad de la debilidad también en junio.