La Comisión de Trabajo del Congreso, reunida con competencia legislativa plena, aprobó ayer la reforma laboral tras introducir varios pequeños cambios en el articulado. De esta forma, el texto termina su paso por la Cámara baja e inicia su trámite en el Senado.

Durante la discusión en ponencia se aprobaron nueve enmiendas parciales del PSOE y, ayer, tras negociaciones de última hora, se introdujeron nuevas modificaciones apoyadas por todos los grupos. Entre ellas destacan el aumento de las bonificaciones a la contratación de discapacitados y el compromiso del Gobierno de abordar nuevas formas de contratación para la transición laboral de los jóvenes.

En concreto, los grupos parlamentarios aprobaron elevar de 250 euros al mes (3.000 euros al año) a un total de 375 euros mensuales (4.500 euros al año) las bonificaciones a la contratación indefinida de los discapacitados. Las ayudas subirán en 100 euros mensuales (1.200 euros al año) si los contratados tienen 45 o más años, y en 70,83 euros al mes (850 euros al año) sin son mujeres.

PRIMAS Las bonificaciones ascenderán a 4.800 euros al año si los contratados sufren parálisis cerebral, enfermedad mental o son discapacitados intelectuales con un grado de minusvalía igual o superior al 33%, o si tienen una discapacidad física o sensorial en grado igual o superior al 65%.

Además, ayer también las ETT brindaron su colaboración al Ejecutivo para agilizar la contratación de los trabajadores extranjeros en sus países de origen aprovechando la experiencia de estas compañías en la gestión de contratos. La Asociación de Grandes ETT (Agett) va más allá y ha pedido al Gobierno que le deje colaborar en el catálogo de ocupaciones de difícil cobertura, así como para preparar un plan integral. La contratación en origen requiere la autorización del Gobierno tras comprobar que no hay candidatos en España.