La aprobación estaba garantizada, y llegó. La Cámara baja de EEUU dio luz verde ayer al plan de estímulo económico del presidente Barack Obama. Y los dos únicos elementos de suspense pendientes se dilucidaron. El precio del paquete queda en 787.000 millones de dólares (610.000 millones de euros) para la próxima década. Y los republicanos confirmaron su rechazo al proyecto.

El paso dado en la Cámara de Representantes dejaba solo pendiente el voto en el Senado, previsto para primeras horas de la noche y en el que se auguraba otra división partidista.

Citgroup y JP Morgan Chase anunciaron ayer que aplazarán los embargos para elaborar con la Administración un plan que modifique las condiciones de las hipotecas problemáticas.