La Comisión de Agricultura del Congreso rechazó ayer la propuesta defendida por el Grupo Socialista en la que solicitaba al Gobierno que valore la repercusión que tendrá la aplicación de la Organización Común de Mercado (OCM) del tabaco sobre el cultivo y en su parte industrial. El diputado socialista, Francisco Amarillo, indicó que "difícilmente" el sector transformador, principalmente el de primera transformación, como Cetarsa, pueda "sobrevivir a una drástica disminución de la producción de tabaco".

Asimismo, aludió que el Gobierno debería tener en cuenta que esta reforma podrá afectar al sector industrial de segunda transformación, con una referencia muy concreta a Altadis. Recordó que ésta empresa está llevando a cabo "unos reajustes de plantilla que afectan a un numeroso grupo de trabajadores" y detalló que el cultivo del tabaco y la industria derivada de la transformación del mismo afecta en España a más de 30.000 familias.

En este sentido, pidió al Gobierno que inste a la UE para que el tabaco "tenga una consideración especial".