La presidencia alemana de la reunión logró incluir en las discusiones el papel de los fondos altamente especulativos, algo a lo que se resistían EEUU y el Reino Unido. En la reunión se vio el creciente peligro que emana de estos fondos, pues son cada vez más las empresas que operan con ellos. El comunicado final subraya su importancia "para la eficiencia del sistema financiero", a cuya "liquidez contribuyen sensiblemente", y destaca la necesidad de vigilarlos.