El Gobierno defiende que suprimir la deducción por adquisición de vivienda a partir de 2011 para rentas superiores a 24.000 euros garantiza que desaparezca un factor especulativo y que "no se pueda volver a dar una burbuja inmobiliaria". La ministra de Vivienda, Beatriz Corredor considera que esta supresión puede ayudar a que el precio de la vivienda se modere y que podría movilizar las viviendas en stock. Respecto al papel que jugará la construcción en el nuevo modelo de crecimiento económico pretendido por el Gobierno, Corredor señaló que se deberá acomodar al cambio incorporando la innovación y la eficiencia energética, dando preferencia a la rehabilitación frente a la nueva construcción. La ministra de Vivienda, Beatriz Corredor asegura que la deducción fiscal le ha servido a la clase media para que los promotores subieran el precio de la vivienda al doble de lo que estaba hace 10 años. "Por tanto, no les ha beneficiado. Nosotros queremos ocuparnos de la gente y de que el mercado se reequilibre, con una oferta y demanda adecuadas y con un precio que esté en el ámbito del IPC, como el resto de los mercados", subrayó. Por ello insistió en que la eliminación de la deducción por adquisición de vivienda a partir de 2011 para rentas superiores a 24.000 euros garantizará que desaparezca el factor especulativo en nuestro país y que ayudará a que no se produzca una nueva burbuja inmobiliaria. La ministra aseguró que esta medida anunciada en el Debate sobre el Estado de la Nación, es "necesaria y oportuna" y explicó que persigue varios objetivos. En su opinión, a corto plazo la eliminación de la deducción fiscal podría provocar una "movilización importante" de las viviendas en stock, mientras que a medio plazo contribuirá a que el sector de la construcción "se redimensione, se reequilibre" y construya sólo las viviendas que se necesitan, sin caer en la especulación. Corredor no desveló si las negociaciones que se están produciendo en el Parlamento elevarán por encima de los 24.000 euros el límite objeto de desgravación y se limitó a señalar que esos 24.000 euros que ha propuesto el Gobierno como tope es "equilibrada". En este sentido, apuntó que el 75% de los españoles declaran ganar menos de 24.000 euros al año y de los que pagan hipoteca, el 63% declara menos de esa cantidad. En cualquier caso, la ministra quiso enviar un mensaje de tranquilidad a todas las personas que están pagando una hipoteca y a todos los que decidan empezar a pagarla de aquí a finales de 2010, pues esta deducción fiscal les seguirá siendo de aplicación "exactamente igual que ahora". "La inmensa mayoría de los españoles va a poder seguir desgravándose, por lo menos los españoles que están en la clase media, que son los que tienen más dificultades para acceder a la vivienda", afirmó Corredor. La ministra destacó además que esta medida "no es independiente y solitaria", puesto que ha venido acompañada de la equiparación de la deducción fiscal para los que pagan alquiler. "Es la primera vez en España se va a tratar igual a los que optan por alquilar que a los que optan por comprar", agregó.

LA CONSTRUCCION Y EL NUEVO MODELO. Respecto al papel que debe jugar la construcción en nuevo modelo de crecimiento económico pretendido por el Gobierno, Corredor señaló que el sector, junto con otros sectores tradicionales, debe acomodarse al cambio de modelo, incorporando la innovación y la eficiencia energética, y atendiendo no tanto a la edificación de nuevos edificios como a la rehabilitación de los ya existentes. En su opinión, la construcción tiene un "importante camino que recorrer y un excelente punto de partida", pues el sector está preparado "de sobra" para tener unos materiales de construcción y sistemas constructivos exportables y a la vanguardia de la técnica constructiva europeo. "Estamos en un momento inmejorable para que se entienda desde el sector y desde las administraciones públicas que tenemos que apostar instintivamente por la rehabilitación y la modernización urbana, pues es un sector que no sólo puede generar empleo de mejor calidad que la construcción, sino que puede mejorar la competitividad de las empresas que fabrican materiales de construcción y de las pequeñas y medianas empresas instaladoras y constructoras", concluyó la ministra.