La tasa de ahorro de los hogares españoles, y de las instituciones sin ánimo de lucro, alcanzó el 7,9% de su renta disponible en el primer trimestre del 2009. Esa tasa resulta 4,8 puntos mayor que la registrada hace un año, según datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). De enero a marzo, la renta disponible de los hogares ascendió, en términos absolutos, a 167.642 millones de euros, con un aumento interanual del 1,5% (2.509 millones más). Al resultado contribuyeron el descenso del saldo en el 2,8% de las rentas primarias, entre las que figura la remuneración de los asalariados. Esa disminución se compensó en parte por el saldo neto de rentas de la propiedad percibidas (intereses y dividendos), que creció el 26,4%.

Respecto a la denominada distribución secundaria de la renta, las familias se beneficiaron hasta marzo de un aumento del 16% en las prestaciones recibidas y de un mayor saldo de transferencias corrientes, el 25,2% más. Desde el punto de vista de los empleos, las cotizaciones sociales pagadas cayeron el 2,8% y los impuestos sobre la renta y el patrimonio pagados descendieron el 6,6%. El INE constata que el consumo de los hogares cayó el 3,6%.

La analista de la Fundación de Cajas de Ahorro (Funcas) María Jesús Fernández señaló que la "fuerte" recuperación de la tasa de ahorro es "la otra cara de la moneda" de la fuerte contracción del consumo, aunque estimó que es un mecanismo "normal" en tiempos de recesión. Pronosticó una tasa de ahorro del 16,8% a cierre del 2009.

El experto de Analistas Financieros Internacionales (AFI) Carlos Maravall cree que el repunte de la tasa de ahorro de los hogares es muy "significativo" y pone de manifiesto que la "notable caída" del consumo privado en el primer trimestre del año no es solo fruto del deterioro de la situación de las familias, sino también de sus "malas expectativas de mejora". En la misma línea se mostró Nuria Bustamante, de Caja Madrid, que dijo que el alza del ahorro es la "corrección" al exceso de endeudamiento que habían tenido los hogares e instituciones, y refleja el proceso de desentumecimiento del sector privado que está teniendo la economía española.