Daimler Chrysler suprimirá 6.000 empleos administrativos, la quinta parte del total en esta área de la empresa y el 30% del equipo directivo, en los próximos tres años. Esta medida, que tendrá un coste de 2.000 millones de euros y se prolongará hasta el 2008, permitirá reducir costes generales al quinto productor mundial de vehículos, así como poner en marcha una gestión mucho más ágil. La firma prevé ahorrarse unos 1.500 millones de euros anuales con esta reestructuración que está pilotada por el nuevo jefe ejecutivo, Dieter Zetsche.

Las acciones de la empresa subieron en la bolsa hasta casi un 5% tras las noticias, y encabezaban las ganancias en el índice sectorial DJ Stoxx European Car Sector. La empresa quiere eliminar casi un tercio del equipo directivo. La reestructuración supondrá cambios en el consejo directivo del grupo, que se reducirá de 12 miembros a nueve.

Daimler quiere fomentar los vínculos entre Mercedes y la parte de EEUU de Chrysler dedicada a compras, investigación y desarrollo, a la vez que mantiene las marcas separadas. Las medidas se enmarcan en un entorno de ajustes en el sector que vive un contexto muy competitivo.