La organización de consumidores Facua ha alertado hoy fraudes mediante falsas ofertas de trabajo en anuncios de periódicos y de páginas web y ha detectado diez que remiten a teléfonos de tarificación adicional. La estafa consiste en que los interesados, tras llamar a un número 902, son remitidos a otra línea para dejar el currículo, esta vez un 806 que llega a facturar entre 26,55 y 46,02 euros por la llamada.

La entidad ha detectado hasta seis modalidades de fraude en las ofertas de empleo a través de teléfonos de tarifación adicional, negocios piramidales, empresas que prometen hacerse rico fabricando productos desde casa, ofertas de empleo que piden dinero para supuestos gastos de tramitación o condicionadas a cursos de formación y otras que buscan muleros para blanquear dinero.

Facua ha denunciado diez ofertas fraudulentas de empleo, seis anunciadas en diarios y revistas y cuatro en páginas web, que remiten a los usuarios a líneas de tarificación adicional, con prefijos 806, 807 y 905, y en la mayoría de los casos, facilitan un teléfono 902 como contacto y, al llamar, un buzón de voz insta a llamar a la otra línea. Algunos de los anuncios proponen: "Ahora gane 1.500 euros. Trabajando en casa. Diferentes manualidades. Ensobrados de publicidad. Trabajos en ordenador. Envían material sin enviar dinero", y cuando el usuario llama al teléfono de contacto, un buzón de voz le remite a una línea 806.

Si los timadores consiguen entretener 30 minutos al usuario, el tiempo máximo que pueden durar estas llamadas, haciéndole preguntas sobre su currículo y disponibilidad, su precio alcanzará entre 26,55 y 46,02 euros, ha alertado el portavoz, Rubén Sánchez.

PETICIÓN DE DINERO

El portavoz de Facua ha alertado del incremento de este tipo de fraudes debido a la crisis y ha reclamado a las administraciones que aumenten los controles y apliquen sanciones contundentes, ya que "algunas invitan al fraude".

Los timos detectados por Facua a través de un estudio de ofertas de trabajo en diarios y en web consisten en el spam de la crisis, es decir, se oferta un trabajo a través de correos basura y cuando el usuario se interesa, se le pide que ingrese en una cuenta bancaria una cantidad para unos supuestos gastos de tramitación del contrato o del envío del material para trabajar.

Otro de los casos es el "hágase rico, o casi, fabricando productos desde casa", de forma que el dinero que se solicita es el teórico coste del material con el que el usuario se dedicará a fabricar productos desde casa para venderlo a través de la empresa, hasta que se da cuenta de que en realidad no ha hecho más que comprarles un material inútil con el que no ganará lo prometido.

BLANQUEO DE CAPITALES

Otra modalidad de fraude es el de determinadas academias de enseñanza que en su publicidad aseguran falsamente que el usuario encontrará empleo en cuanto finalice uno de sus cursos y otras se hacen pasar por ofertantes y los condicionan a la contratación de cursos. También hay negocios piramidales en los que el supuesto trabajador debe comprar productos a la empresa para revenderlos captando nuevos empleados y, en realidad, los afectados no son más que clientes de la compañía que les hace creer que se harán ricos en poco tiempo, cuando en realidad pueden acabar arruinados.

La técnica "más grave" consiste en hacer creer al usuario que ganará mucho dinero actuando como mediador en transacciones internacionales y, para ello, debe recibir transferencias en su cuenta bancaria y reingresar el dinero en otro número de cuenta quedándose con una pequeña comisión.

De esta forma, actúa sin saberlo como mulero en un negocio de blanqueo de dinero que puede acarrearle consecuencias penales.