El descenso del precio del crudo iniciado en agosto ha permitido que en septiembre la inflación se reduzca por segundo mes consecutivo y se sitúe en el 4,6 por ciento, según las estadísticas oficiales difundidas hoy.

Así, este mes la inflación armonizada interanual ha caído tres décimas y se ha situado en el 4,6 por ciento, según el indicador adelantado del Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) -que mide los precios de forma armonizada con el resto de países de la zona euro- publicado hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y cuyo dato definitivo se conocerá el 14 de octubre.

Para el secretario de Economía del PP, Alvaro Nadal, la inflación sigue siendo "muy alta", a pesar de la moderación que registraron los precios en septiembre por la caída del barril de crudo.

En su opinión, en una situación cercana a la recesión y con un alto incremento del desempleo esa moderación de los precios debería haberse notado "más".

Al respecto, recordó que el dato adelantado publicado hoy es superior en 1,9 puntos al que se registró el mismo mes del pasado año. El portavoz de CiU en el Congreso, Josep Sánchez Llibre, valoró la caída, pero advirtió al Gobierno de que "no hay que bajar la guardia" porque España sigue teniendo una inflación por encima de la media de la Unión Europea.

Por ello, insistió en la necesidad de "estar alerta" y abogó por acometer reformas estructurales que flexibilicen la economía y liberalicen sectores como el transporte ferroviario, puertos, aeropuertos, correos y energía.

Mientras, los expertos consultados por EFE lo calificaron de "previsible" y auguraron que en los próximos meses, a medida que se mantengan los precios del crudo, el IPCA continuará la actual senda descendente.

Los precios han bajado en septiembre por segundo mes consecutivo, después de que en agosto el IPCA cayese cuatro décimas hasta el 4,9 por ciento, lo que representa el tercer descenso en lo que va de año, después del primer descenso en abril de cuatro décimas, hasta el 4,2 por ciento.

Desde septiembre de 2007, el encarecimiento del crudo y de las materias primas a escala internacional situó en máximos históricos la tasa de inflación, aunque desde el pasado agosto el barril de Brent, de referencia en Europa, ha pasado de 147 dólares de julio a rondar los 100 dólares en septiembre (el mismo precio que hace un año).

Pese al descenso de la inflación armonizada, el dato adelantado hoy es superior en 1,9 puntos al que se registró el mismo mes del pasado año, cuando el IPCA alcanzó el 2,7 por ciento.

En el caso de que el IPC de septiembre coincida con la tasa general de inflación española, también se trataría de la segunda caída consecutiva, y de la tercera en lo que va de año, aunque del mismo modo sería muy superior al 2,7 por ciento del mismo mes de 2007.

El profesor del IE-Business School Juan Carlos Martínez-Lázaro declaró a EFE que "previsiblemente" los países de la zona euro sigan la misma línea que España y reduzcan su inflación armonizada.

En este contexto, considera que el Banco Central Europeo (BCE) puede estudiar este otoño bajar los tipos de interés. Asimismo, espera que el IPCA español acabe el año entre el 3,5 y el 4 por ciento, siempre que el precio del crudo se mantenga en los niveles actuales.

Una estimación que también comparte el director de Coyuntura de la Fundación de Cajas de Ahorros (FUNCAS), Ángel Laborda, quien prevé que la inflación alcance el 3,5 por ciento a finales de año, siempre que el petróleo y los alimentos no vuelvan a registrar las "fuertes" subidas de los últimos meses de 2007.

La experta de Caja Madrid Nuria Bustamante afirmó a EFE que el abaratamiento del crudo se ha trasladado tarde al precio de los combustibles, de manera que la cifra publicada hoy es ligeramente más alta que la que se calculaba, en lo que coincidió la analista de Fortis Estafanía Ponte.

Fortis esperaba que el IPCA de septiembre se hubiese situado en el 4,4 por ciento, mientras que estima que cierre el año en el 4 por ciento.

Más optimistas se mostraron desde Analistas Financieros Internacionales (AFI) quienes esperan que el IPC armonizado alcance el 3,1 por ciento al cierre del año.