Las autoridades estadounidenses han acusado al multimillonario tejano Robert Allen Stanford de montar un entramado fraudulento de inversiones por el cual captó 8.000 millones de dólares con la promesa de alta rentabilidad.

La Comisión del Mercado de Valores (SEC, en inglés) hizo públicos hoy los cargos, al tiempo que agentes de la policía federal tomaban las oficinas de Stanford en Houston (Texas).