José Luis Rodríguez Zapatero, como líder del PSOE, pedirá a ayuntamientos y autonomías socialistas que hagan un esfuerzo de austeridad, "que reduzcan gasto corriente o aplazable y que agilicen, al máximo posible los pagos a las empresas". El presidente pidió al resto de los partidos y, en particular, al PP, una actitud similar como fórmula para aliviar la morosidad con las empresas.

Duran Lleida (CiU) planteó con determinación que el Estado avale a los ayuntamientos para que estos reduzcan los largos plazos con que pagan a las empresas. Recordó que el sector público debe 33.000 millones y que los pagos superan a menudo los 6 y 7 meses. Agilizar esos pagos sería "una auténtica inyección de liquidez, superior a la que ustedes ya han puesto a disposición del ICO", aseguró Durán, pero el presidente Zapatero no recogió el guante.