El producto interior bruto (PIB) de Alemania en los tres últimos meses de 2012 experimentó una contracción del 0,6%, ligeramente por encima de las estimaciones que auguraban una caída de medio punto porcentual respecto al tercer trimestre, cuando la economía germana creció un 0,2%, según ha informado la Oficina Federal de Estadística alemana (Destatis).

No obstante, en términos interanuales la economía de Alemania logró crecer una décima en el cuarto trimestre de 2012, lo que permite a la primera economía europea cerrar 2012 con una expansión del 0,7%.

Por su parte, el Instituto de Estadística de Francia (Insee) informó de que la economía gala retrocedió un 0,3% en el cuarto trimestre, respecto a los tres meses anteriores, cuando logró crecer una décima.

De este modo, la segunda mayor economía de la eurozona experimentó en el conjunto de 2012 un crecimiento medio nulo, en contraste con la expansión del 1,7% registrada en 2011.