Estados Unidos, el mayor consumidor de petróleo del mundo, reclamó ayer que se supriman los subsidios a los combustibles como medida para frenar la crisis y advirtió al mundo de que se prepare para más aumentos de precio tras el récord de ayer, que situó el barril de crudo en casi los 140 dólares. El secretario estadounidense de Energía, Sam Bodman, atribuyó a los subsidios --muy comunes en países asiáticos-- un mayor consumo del combustible, pero también instó a los países productores a difundir más información sobre cuánto pueden producir. Una postura muy lejana de la de Francia, favorable a las ayudas.

"SERIA PREOCUPACION Bodman defendió sus posiciones junto a China, Japón, India y Corea del Sur, los cinco mayores consumidores de petróleo del mundo, en una reunión en Aomori (norte de Japón), que concluyó ayer con una declaración conjunta en la que expresan "su seria preocupación por los elevados precios del combustible". El precio del petróleo alcanzó el viernes el máximo histórico de casi 139 dólares por barril en Nueva York.

"Estos precios van en contra de los intereses de los consumidores y de los países productores", dice el comunicado de los cinco países, que pidieron a los grandes productores que estabilicen la situación del mercado del crudo y que aseguren que la demanda no superará a la oferta.