El pan ha dejado de ser un alimento omnipresente e imprescindible en la mesa de muchos españoles. Estos han reducido de media su consumo en el 80% a lo largo de dos décadas. Ahora el Gobierno se ha propuesto rescatar su consumo y por ello el Consejo de Ministros de ayer aprobó un real decreto que democratiza entre todos los panes el tipo reducido del IVA al 4%.

Otra de las modificaciones es que se limita la cantidad de sal que se puede emplear para elaborar el pan común. El límite máximo será obligatorio a partir de abril del 2022.

El Gobierno también introdujo un aviso para panaderos, pues si bien se democratiza el aspecto fiscal no todos los panes son iguales a los ojos de la nueva ley. Los requisitos para considerar un pan integral serán más estrictos, pues es obligatorio que el 100% de la harina sea integral. Los que no estén elaborados de forma exclusiva con ella, deberán acreditar el porcentaje de «pureza» en el etiquetado. Lo mismo sucede con la definición de pan multicereal, pues este deberá estar elaborado con tres o más harinas. Cada una de las tres estará en una proporción mínima del 10% y las harinas procedentes de cereales no podrán suponer menos del 30% de la mezcla total.