El secretario de Estado para la UE, Diego López Garrido, pidió hoy a la Comisión Europea que garantice que la reestructuración de Opel no esté sujeta a "influencias políticas" sino que se realice según criterios estrictamente económicos. Sin embargo, López Garrido no fue tan lejos como Bélgica o Reino Unido, que han denunciado el proteccionismo del Gobierno alemán para mantener las plantas de Opel en su territorio.

"España le va a exigir a la Comisión que aplique la legalidad comunitaria, que haya una solución europea a este asunto y que no haya ningún tipo de ayuda de Estado o decisión de Gobiernos que condicionen la decisión empresarial", dijo López Garrido en declaraciones a la prensa a la entrada de una reunión de ministros de Industria de la UE. El Gobierno quiere que el Ejecutivo comunitario esté "vigilante" para garantizar "que no haya una influencia política que condicione las decisiones empresariales".

López Garrido se reunió este miércoles con el vicepresidente de la Comisión y responsable de Industria y Empresa, Günter Verheugen, y le trasladó personalmente esta demanda. El alemán le aseguró que el Ejecutivo comunitario "no va a dejarse influenciar por tal o tal Gobierno en función de razones políticas sino que va a aplicar la ley europea", según explicó el secretario de Estado de Asuntos Europeos.

Al ser preguntado por si cree que el Gobierno alemán está vulnerando la legislación europea para garantizar la supervivencia de las plantas de Opel en su territorio, López Garrido admitió que "cada país está pensando en sus intereses nacionales", pero se negó a hacer "procesos de intenciones". "Nosotros no podemos sospechar intenciones", dijo.

Dejó claro que España va a "mirar con mucho detalle" el plan de reestructuración presentado por la empresa canadiense Magna para comprar Opel. Pero se declaró "convencido" de que "se va a aplicar la legalidad europea, la competencia y que no se va a dejar que las razones de tipo político o de puro interés nacional predominen sobre lo que debe ser una solución de nivel europeo".

PUESTOS DE TRABAJO EN FIGUERUELAS

"Nosotros estamos pensando por supuesto también en los intereses españoles. Estamos trabajando con el Gobierno de Aragón, estamos teniendo muy en cuenta lo que dicen los sindicatos", resaltó el secretario de Estado de Asuntos Europeos. Al ser preguntado por si ve posible salvar los puestos de trabajo en la planta de Figueruelas (Zaragoza), López Garrido explicó que el comisario Verheugen le había comunicado que "a nivel europeo, en cuanto a las plantas de Opel, puede haber algún tipo de afectación a puestos de trabajo". Pero insistió en que cualquier recorte de empleo debe decidirse por motivos económicos y no políticos.

El ministro británico de Empresa, Peter Mandelson, ha enviado una carta a la comisaria de Competencia, Neelie Kroes, en la que cuestiona la viabilidad del plan empresarial de Magna para Opel y le pide que garantice "una solución basada en criterios comerciales y no una que esté determinada por la intervención política y los subsidios", según publicó este jueves el rotativo británico 'Financial Times'.