No hay nada como una buena e inesperada noticia para que el mercado recupere el vigor. La bolsa parecía abocada a romper con siete meses de subidas y cerrar octubre en negativo, debido al vértigo con que los inversores han acogido la falta de una mejora más rápida de lo esperado de la coyuntura económica y de los resultados empresariales.

La inesperada fortaleza con que Estados Unidos ha salido de la recesión (3,5% de crecimiento en el tercer trimestre) borró ayer de un plumazo estos temores a que la fuerte revalorización de los mercados en lo que va de año se asiente en bases endebles. El Ibex 35 se apuntó una revalorización del 2,22%, hasta los 11.683, y rompió así con un estado de depresión que duraba ya cinco sesiones. De la jornada de hoy depende que el selectivo español, salvo gran sorpresa, acabe octubre con un pequeño descenso o ascenso.

Al buen dato estadounidense se sumó la también inesperada reducción del paro en Alemania. Y para apuntalar aún más el optimismo, se supo que la confianza económica en la zona euro ha mejorado más de lo augurado. Los inversores españoles fueron los que más se dejaron impregnar por las sensaciones positivas, pero no los únicos. El selectivo italiano se revalorizó el 2,05%, mientras que el alemán mejoró el 1,66%, el francés se apuntó un alza del 1,37%, y el británico subió el 1,13%.

Muestra del buen tono de la jornada fue también que el Euro Stoxx 50, que reúne a los principales valores del continente, experimentó un ascenso del 1,67%. Y que el barril de petróleo brent ascendió a 77,69 dólares y el euro a 1,4833 dólares. Los cinco grandes valores españoles --particularmente los bancos, muy castigados los últimos días-- se apuntaron ascensos: Santander (3,56%), BBVA (3,28%), Repsol (1,78%), Iberdrola (1,29%) y Telefónica (0,95%). Telecinco lideró las ganancias (9,75%) junto con Técnicas Reunidas (5,07%) y Acciona fue la que menos creció (0,6%).