La campaña de Barack Obama marcó un hito, no solo por el cambio político, sino también porque exprimió el potencial de internet. Rafah Harfoush, estratega de la campaña de comunicación de nuevas tecnologías del ahora presidente de EEUU, explicó ayer, en la inauguración del BDigital Congress de Barcelona, las claves de aquel éxito.

Harfoush defendió la importancia de "implicar" al ciudadano en la causa política a través de las redes sociales como Facebook, MySpace o Twitter: "No necesitábamos depender de la prensa local, enviabas un vídeo a la web y millones de personas lo veían". Internet, remarcó, siempre debe estar al servicio de las personas: "Esta tecnología tiene que ver con las relaciones entre personas, que son el aspecto más antiguo de las comunidades". Harfoush opina que Europa puede importar esta forma de hacer política si los partidos siguen dos consejos: "Estar donde está la gente y escucharla".